La Comisión Europea aprobó ayer, 19 de abril, el texto definitivo de las Directrices sobre ayudas estatales de finalidad regional para el periodo 2022-2027, incluyendo a las provincias de Soria, Cuenca y Teruel entre los territorios susceptibles de beneficiarse de ayudas destinadas a las empresas al objeto de compensar las desventajas competitivas que provoca la despoblación.
Con este paso, las empresas de Soria, Cuenca y Teruel -las tres provincias españolas con densidades de población inferiores a los 12,5 hab/km2-, se equiparán a las regiones más despobladas de Suecia, Finlandia y Noruega, pudiendo beneficiarse de ayudas de estado equivalentes a un 20% de los costes laborales.
Para conseguir esta equiparación ha sido determinante el intenso trabajo desarrollado conjuntamente por FOES, CEOE-CEPYME Cuenca y CEOE Teruel a lo largo de los últimos años. El camino comenzó con la presentación de dos informes que hoy se han demostrado fundamentales, de una parte, el elaborado por el Tribunal de Defensa de la Competencia de Aragón, que determinó que las empresas de Teruel -además de las de Soria y Cuenca-, podían ser beneficiarias de compensaciones por sus bajos niveles de población. De otra, el documento sobre ‘Una fiscalidad diferenciada para el progreso de los territorios despoblados en España’ -elaborado por la Red SSPA y Grupos de Acción Local- y donde se cuantificaba el coste y el retorno a las arcas públicas que podrían suponer las diferentes medidas fiscales disponibles, así como su contribución a la hora de corregir los desequilibrios territoriales provocados por la despoblación.
Alegaciones al borrador de las Ayudas de Estado
Un paso fundamental fue la presentación por parte de las Organizaciones Empresariales y de las Comunidades Autónomas de sendas alegaciones al borrador de las Directrices de Ayudas de Estado previstas para el periodo 2022-2027. En el caso de las CEOEs, su contenido se fundamentó en presentar un diagnóstico demográfico de las tres provincias, seguido de un análisis de su estructura económica y del tejido empresarial. Con ello se evidenció, de una parte, las similitudes demográficas existentes con las regiones escandinavas y, por otra, que la aplicación de estas ayudas no afectaría a los principios de competencia y libre mercado ni a escala nacional ni europea. De hecho, el trabajo de las patronales ponía de manifiesto que las tres economías provinciales apenas representan el 0,83% del PIB nacional, el 0,85% del total de empresas de España y que el valor conjunto de las exportaciones de las tres provincias tan solo alcanza el 0,040% del conjunto nacional. El hecho de que el 95,7% del tejido productivo de Cuenca, Soria y Teruel se concentre en microempresas y autónomos resultó igualmente fundamental para demostrar ante la Comisión Europea, que las grandes beneficiarias de las ayudas serían las empresas más cercanas al territorio y las que consiguen asentar población en las localidades de menor tamaño.
Además, las alegaciones presentadas por las patronales incluyeron un análisis del impacto positivo que las ayudas de estado habían generado en los territorios menos poblados de Noruega, país que viene aplicando estas medidas desde mediados de la década de los 70, para lo que se apoyó en diversos informes elaborados por el Ministerio de Finanzas y Gobierno Local de Noruega donde se evidencia que la reducción de las cuotas a la seguridad social resulta la medida más efectiva para transformar la falta de competitividad que caracteriza al tejido empresarial de las regiones afectadas por una estructura demográfica poco dinámica, alentando un “círculo virtuoso” que comienza con el aumento inmediato de los márgenes empresariales, continua incentivando la inversión y mejorando la productividad y, finalmente, consigue impulsar la creación de empleo y la mejora de las condiciones laborales de los trabajadores.
Siguientes pasos
Gracias al esfuerzo y lobby realizado en Europa por parte de las tres organizaciones empresariales y también al trabajo de sus respectivas Comunidades Autónomas se ha logrado el reconocimiento por parte de las autoridades comunitarias de las especiales dificultades a las que se enfrentan las empresas de las provincias más escasamente pobladas, poniendo de manifiesto la necesidad de que instrumentos de cohesión territorial, como es la fiscalidad diferenciada a través de las ayudas de estado, también sean aplicadas en el Sur de Europa.
Por su parte, las organizaciones empresariales se emplazan a seguir trabajando de la mano de sus gobiernos regionales para hacer efectiva esta posibilidad, para lo que ya han solicitado una reunión con los responsables políticos y técnicos del Ministerio de Hacienda, ya que es importante resaltar que debe ser el Gobierno de España, el que concrete su aplicación práctica en el plazo más breve posible.
Sin lugar a dudas, este reconocimiento marcará un antes y un después en la situación económica general de las tres provincias, y en la situación particular de cada una de las empresas que integran el tejido productivo de Soria, Cuenca y Teruel.
Fuente: SSPA
Fecha: 20 de abril de 2021