Los artesanos de la Asociación Soriana de Empresarios de Confitería, Pastelería, Bollería y Repostería (ASEC) han recuperado un año más las recetas clásicas con las que elaboran sus torrijas, empezando a acompañarlas con nuevos sabores en algunos de los obradores.
Trufa, chocolate, yema, nata y vino dulce adornan y saborizan este popular dulce de Semana Santa en algunas de las pastelerías de ASEC. Las pastelerías de la asociación ya han comenzado a vender las primeras de las aproximadamente 5.000 unidades que estiman poner en el mercado estos días.
La cifra es similar a la de años anteriores. Pese a las restricciones de movilidad, ASEC confía en lograr una buena respuesta por parte de los consumidores sorianos, a quienes agradece el apoyo a la hora de consumir productos locales durante estos meses de pandemia.
Algunos de los establecimientos de la Asociación ofrecen ya este tradicional postre que históricamente ha reconfortado los estómagos de los seguidores de la abstinencia y de los sobrios menús de Semana Santa.
El pan es el gran protagonista de una receta que se elabora en Soria con ingredientes de proximidad y de gran calidad y que cada maestro pastelero personaliza con ‘toques’ en sus recetas, heredados de generaciones anteriores.
Las torrijas comparten mostradores estos días con los buñuelos, que se ofrecen también en distintas variedades en los establecimientos de ASEC.
Junto a ellos, el chocolate completa la dulce tradición de Pascua con los huevos y las ‘monas’, que si bien son típicas de Cataluña, son bien recibidas por los consumidores sorianos en estas fechas.
El Abuelo José Luis (Arcos de Jalón), Confitería Almarza y Yemas González (ambas en Almazán), Mantequerías York, Dulces Duero y Venus Selección (Soria ciudad); Confitería El Torero (Berlanga de Duero) y Pastelería Moraga (El Burgo de Osma) son los establecimientos que constituyen en la actualidad la Asociación Soriana de Pasteleros.
Los pasteleros fundamentan su trabajo en elaboraciones personales realizadas con una materia prima de primera calidad y traspasadas, en algunos casos, de generación en generación. Mantequerías York, por ejemplo, conserva su receta de torrijas desde 1957 y Confitería Almarza presume ya de casi dos siglos de existencia.
Constituidos en 1978 en Asociación, ASEC trabaja en la elaboración de productos diferenciados y ha conseguido que buena parte de sus productos sea seña de identidad de la gastronomía soriana. Su último logro en este sentido es la creación de la marca ‘Costrada de Soria’, presentada este mismo año.
La Asociación Soriana de Empresarios de Confitería, Pastelería, Bollería y Repostería (ASEC) está integrada en FECSoria (Federación de Empresarios de Comercio de Soria) y es miembro a su vez de la Federación de Organizaciones Empresariales Sorianas (FOES).
Fuente: ASEC