Los precios de la vivienda prosiguen el proceso de aceleración, impulsados por las grandes ciudades. El valor de los inmuebles creció un 3,7% en julio, respecto al mismo nivel del año anterior, de acuerdo con los datos de la tasadora Tinsa. Esta cifra no sólo supone una aceleración de 1,3 puntos respecto a la cifra del sexto mes del año, sino que también supone el mejor registro en casi diez años, desde octubre de 2007, de acuerdo con el informe, cuando la desaceleración del mercado se estaba haciendo ya evidente.
Las capitales y grandes ciudades no son sólo el segmento que más sube de precio en junio, sino también el que más se acelera. Las viviendas ubicadas en estas zonas se encarecen un 6,4% en julio, lo que supone el dato más elevado desde finales de 2007 y un fuerte empujón de 1,8 puntos respecto al sexto mes del año. El precio de los inmuebles en las grandes ciudades se ha visto muy impulsado por la pujanza de la demanda y la escasez de stock sin vender, así como la tardanza de algunas nuevas promociones. Pese a este incremento, los precios todavía se sitúan un 41% por debajo de los máximos alcanzados en 2007.
Litoral mediterráneo
En un segundo plano queda la costa mediterránea, con un incremento del 3,2%, lo que supone también un cierto repunte desde el 1,9% del mes anterior. Esta zona avanza más lentamente que el resto y da frecuentes trompicones debido a que su situación es muy heterogénea. Mientras algunas ciudades están entre las más demandadas de España, otras se ven lastradas por un ingente volumen de pisos sin vender. De hecho, las viviendas ubicadas en este litoral todavía se sitúan un 45,8% por debajo de los niveles previos al estallido de la burbuja, lo que supone el descenso más acusado entre todos los segmentos del mercado.
También hay un notable encarecimiento en Baleares y Canarias, con una subida de los precios del 2,6%. Es cierto que este avance es más moderado que el de otras zonas, pero esto se debe, en gran medida, a que el descenso de los precios de la vivienda en ambos archipiélagos ha sido mucho más moderado que la media. Además, la recuperación también fue mucho más fuerte que la media en los primeros compases de la reactivación del mercado.
Los precios de los inmuebles en las islas caen un 27,4% respecto a los máximos de 2007, doce puntos menos que la media, y ya aumentan un 10,9% respecto a los mínimos durante la crisis, casi el doble que el el conjunto del país.
Por último, la vivienda en las áreas metropolitanas y en el resto de los destinos sube por debajo de la media, pero ambas zonas muestran una notable tendencia al alza, ya que el mercado inmobiliario había tardado en arrancar en ambas zonas, lastrado por la falta de demanda. Por un lado, los precios en las áreas metropolitanas de las grandes ciudades avanzan un 2%. Es cierto que este incremento es inferior al del mes anterior (4,1%), pero también lo es que consolida una tendencia alcista que cuesta ver en este segmento del mercado que la última vez que sumó dos meses consecutivos al alza fue hace más de un año.
La demanda se desplaza
Por otro lado, el resto de municipios vuelven a recuperar la senda alcista, después de un mes en negativo. Estos inmuebles se encarecen un 0,8%, todavía con un tono débil. Con todo, los expertos señalan que la recuperación de los precios de la vivienda se podría extender con más vigor, entre este año y el próximo, tanto a las áreas metropolitanas como a las localidades más pequeñas. La razón es que ambos se han quedado descolgados en la recuperación, por lo que los precios todavía son relativamente asequibles. Esto podría aumentar el atractivo para los compradores conforme los precios se aceleran en las grandes ciudades, provocando un desplazamiento de las compraventas a la periferia.
