La economía española sigue coqueteando con la deflación o, al menos, con la ausencia de inflación. El dato de IPC del mes de julio confirmó la cifra adelantada por el INE, y queda en una tasa interanual negativa del 0,3%, el dato más bajo en casi cinco años. Desde octubre de 2009 no caían tanto los precios, y entonces el dato estaba condicionado porque el petróleo se disparó en 2008 y llevó la inflación a zonas del 5%.
Los grupos con mayor influencia en la bajada de julio son el transporte, es decir, las gasolinas, cuya variación interanual ha pasado del 1% a un escaso 0,1% y es responsable de la mitad de la variación interanual de los precios. La vivienda, con el menor crecimiento de los precios de la luz, y la alimentación son las otras partidas responsables del retroceso de los precios.
No obstante, la caída o estancamiento de los precios no es puntual.De los 57 grandes grupos de productos que incluye el INE en sus cálculos, solamente 25 marcan cifras positivas en términos interanuales. Además, la inflación subyacente, que excluye energía y alimentos y se considera un indicador más estable, está en el 0%, nivel en el que lleva tres meses.
Asimismo, el IPC mensual también registró una tasa negativa, del 0,9%. Es el dato más bajo desde que en enero marcase un 0,9%. En términos europeos, el IPC armonizado (que se usa para comparar la inflación en la zona euro) termina el mes en el -0,4% interanual y el -1,5% intermensual.
Fuente: cincodias.com